La planificación de la producción consiste a organizar de una manera estructurada los pedidos recibidos para poder producir y servir el producto en los plazos requeridos por el cliente. Con el objetivo de poder tener una producción organizada tenemos que contar con diferentes factores que marcarán la diferencia en la hora de poder alcanzar las necesidades productivas, así como unas prioridades establecidas que nos permitan satisfacer las necesidades de los clientes.
Una buena planificación de la producción es aquella que:
• Está organizada en función de las prioridades productivas marcadas.
• Tiene en cuenta los tiempos de cambio y ajuste entre referencias.
• Mantiene las máquinas saturadas a lo largo del tiempo.
• Contempla las paradas técnicas para los mantenimientos requeridos.
• Es suficiente elástica para poder absorber los imprevistos y reordenar las producciones para poder cumplir con las necesidades de los clientes.
Para poder cumplir con estas condiciones es necesario disponer de ciertas herramientas que nos permitan tener información sobre los diferentes factores productivos como pueden ser un listado de pedidos anual, cadencias de máquina, compatibilidad de referencias, número de operarios requeridos para operar las máquinas, tiempos de cambio de referencia, tiempo de parada técnica o mantenimiento y control estadístico de las averías, entre otros. A esta lista se pueden incluir otros factores de relevancia en función de la actividad o el funcionamiento de la empresa.
Habiendo definido estas variables, tenemos que poder relacionarlas entre ellas, de forma que seamos capaces de obtener un algoritmo que permita establecer en función de las fechas de entrega los inicios de producción.
Es importante darse cuenta que el vínculo entre estos factores es de vital importancia por no incurre en gastos no previstos y que generalmente no se tienen en cuenta en la hora de escandallar los productos, pero sí que tienen un impacto en el coste de la fabricación.
Poniendo un ejemplo muy sencillo y simplificado:
«Durante el año hemos trabajado 3 turnos con 10 máquinas 5 días en la semana y hemos realizado un control estadístico de las averías recurrentes fuera de los periodos de mantenimiento o parada técnica, del cual logramos un indicador que nos refleja que las averías representan un 3% del tiempo total invertido en la fabricación. Mediante la contabilidad analítica por centro de costes hemos determinado que el precio, hora de la empresa son 35 €/h.«
Los gastos asociados a estas averías imprevistas representan un total de 1.800 horas en las cuales estas máquinas no han producido. El coste de los tiempo asociado a estas paradas representa 63.000 €.
En este ejemplo vemos la relevancia de tener un seguimiento de las averías a lo largo del tiempo para documentarlas e incluirlas como puntos a revisar en los mantenimientos y, por lo tanto, estén contempladas dentro del precio de coste del producto.
La conclusión que podemos extraer es que una planificación de la producción nos permitirá:
• Producir organizadamente
• Obtener un alto rendimiento productivo
• Ahorrar costes no repercutibles
• Poder reaccionar ante los picos o bajadas de demanda de producto
• Tener mayor capacidad para analizar los puntos de mejora de los procesos y métodos productivos.
Deja una respuesta